El juez de Estados Unidos David Shaw ha dictaminado que la compañÃa de Redmond no ha infringido la propiedad intelectual de Motorola (ahora propiedad de Google) respecto a la tecnologÃa de conectividad inalámbrica en su consola de sobremesa.
Curiosamente, al principio la demanda (presentada en 2010) incluÃa también violaciones de otras dos patentes relacionadas con la codificación de vÃdeo, aunque Motorola las retiró tras recibir acusaciones de que las estaba utilizando para restringir las posibilidades de la competencia.